viernes, 24 de agosto de 2012

El ascensor de Oscar

Perteneciente a la lujosa horneada de jóvenes nacidos a partir 1990 en Brasil. Neymar, Lucas Moura o Danilo son algunos de los jugadores coétanios con los que Oscar comparte el momento. Por físico y comprensión de juego es el más distinto de todos. Con un físico completamente liviano, sin la misma potencia para arrancar o con menos inventiva para el regate reúne otras cualidades que lo harán trascendental para el futuro de su selección y para los intereses 'blues' de demostrar que son mejores que el Manchester City en igualdad de condiciones. Oscar es comprensión del juego, lee y gestiona los espacios como nadie algo que a día de hoy en el fútbol pocos jugadores pueden decir. El verano de 2012 será más que significativo ha demostrado su plasticidad en diversas posiciones, hecho que le proporciona ser un activo más que sólido.

Oscar es un gran acierto para el Chelsea. Solucionará problemas.
Con el 4-2-3-1 con el que Mano Menezes afrontaba los JJOO, la amplia libertad que daba a los jugadores que viven por delante del esférico le permitía a su elenco de jóvenes sacar los partidos con ciertas facilidades. Oscar abarcaba casi siempre el carril central para contemporizar, esperar y dar el último pase con el que batir las última línea defensiva no contento con ésto siempre esperaba un rechace en la frontal con el cuál demostrar su faceta de llegador. Parecía que estaba anclado a ser un jugador solo útil en los últimos metros pero... no es así. Durante el camino aparecieron problemas que él mismo tuvo que resolver.

La rigidez creativa de Rómulo & Sandro, agravada aún más por el pésimo estado físico y mental de Ganso, dejaba carencias en la base de Brasil. Costaba en muchos momentos encontrar fluidez de balón, se disimulaba en parte gracias al enorme potencial ofensivo de sus piezas que les dejaba como claros favoritos para alzarse con el oro. Oscar lo interpretó todo bien en vez de alejarse comenzaba con su particular ajetreo. Bajaba al auxilio cuando era necesario y con un simple toque de balón paliaba ese déficit, comenzaba un largo camino que le llevo en diversos tramos a jugar por detrás de balón. Se estaba esbozando un dibujo de todo lo que puede ser. El mejor actor secundario que Neymar puede tener.

Sus actuaciones no pasaron desapercibidas. Un joven brasileño con buena capacidad para leer tácticamente los partidos y que tiene un potencial para gestionar todo el campo. Abramóvich no se lo pensó había que traerlo de cabeza a Stamford Bridge. Con su futuro aclarado siguió con su evolución exponencial, habituándose a jugar cada vez más y más atrás para ayudar al colectivo a lograr sus objetivos. El Chelsea había firmado una de las mejores perlas del fútbol brasileño y junto con Neymar el que mejor sensaciones desprende. Brasil se estrelló en la final contra Diego Reyes pero Oscar había despuntado y encandilado a Europa a base de leer los movimientos de los compañeros y de retrasar su posición para que el colectivo mejorará.

Por futuro y presente el Chelsea tiene en los metros finales un potencial descomunal. Mata, Hazard y la llegada del brasileño lo convierten en uno de los equipos más estimulantes de ver cada fin de semana. A pesar de las dudas que se plantean sobre si Di Matteo apostará o no por él, sigo pensando que en un cierto margen de tiempo será titular, se han resuelto alguna de las incógnitas sobre el posicionamiento que tendrá el equipo en 3/4. Hazard ocupará el carril central y permutará con Mata sobre banda izquierda, buscando un alto nivel de asociación sobre éstos, la derecha, por ahora, es territorio de Ramires. 

Contra el Wigan, en el debut liguero del Chelsea y de Oscar, Di Matteo nos privó de ver juntos a ese trío que está destinado a hacer grandes cosas. Cambió a Hazard, que ha dejado patente que su adaptación es más que un hecho tangible, y ya comenzó a hacer su función de 'ascensor'. Bajaba y subía su posición para dar creatividad al desierto de ideas que suele ser ese dúo Mikel & Lampard, permutaba con Mata sobre el costado derecho y le sobró para demostrar que también sabe llegar. Debut dulce.

Se mantiene el 4-2-3-1. Oscar & Lampard en la base. Novedad en Oscar.
Obligado por el contexto lo que Di Matteo te quita también te lo da. Contra el Reading Oscar dio su último paso y más firme hasta la fecha, cambio a un Ramires un tanto apático y por primera vez junto a los 3 'deseados'. Oscar partió desde la izquierda, Hazard por detrás de Fernando Torres y Mata desde la derecha. Ese fue el posicionamiento que el técnico quiso darle, no terminó de arrancar y se vio algo inaudito hasta la fecha. La entrada de Sturridge hizo que el impacto del joven brasileño fuera aún mayor, jugó por pocos minutos anclado en la base y la fluidez del Chelsea en esos tramos fue muy natural. Se llegaba bien y el conjunto visitante se defendía como podía ante las acometidas. Oscar demostró que es más que un ascensor funcional, puede vivir por detrás y por delante de balón siempre que el contexto lo pida. 

Puede que esta imagen se repita más veces pero lo que se saca en claro es que el brasileño es un diamante en bruto y con una extensa flexibilidad posicional que ha ido desarrollando en los últimos 2 meses. Como falso extremo, enganche y ahora mediocentro... un lujo para cualquier equipo y que gestiona los espacios como nadie. No fue un capricho del magnate ruso, quizá junto con Hazard el mayor acierto la entidad de Stamford Bridge y que puede poner fin a los problemas creativos del Chelsea en caso de que el escenario sea poco favorable.

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